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domingo, 13 de noviembre de 2011

Fiebre Navideña

Es curioso ver que cada año que pasa la navidad comienza antes. Todas las tiendas y la televisión se encargan bien temprano a mostrarle a la gente que es hora de hacer los adornos en las casas, comprar la mercadería para la cena de noche buena, y lo más importante, o quizás lo menos importante, comprar la mayor cantidad de regalos posible. Tanto es así, que ya terminado octubre, e incluso antes, las tiendas tiran practicamente toda la carne a la parrilla en cuanto a la navidad.


Si analizamos un año en terminos comerciales, éste se convierte simplemente en una serie de ciclos de negocios Veamos... Partimos el año con enero donde se comienza con la venta de productos escolares cerca de de mitad de mes, lo cual lo encuentro macabro para los estudiantes. En febrero le toca el turno a la venta de chocolates, flores, corazones, peluches, tarjetas y accesorios por el día de San Valentín. En marzo es el peak de las ventas de productos escolares que comenzaron en enero. En abril tenemos la semana santa que comercialmente hace que el pescado y los huevitos de chocolate sean productos que cada persona DEBE comprar. Entre mayo y julio tenemos el día del padre y de la madre, 2 fechas que hacen que artículos de todo tipo disparen sus ventas (anécdota: una vez vi en una tienda un aviso del día de la suegra!!!). En agosto se viene con todo el día del niño, en esta ocasión trayendo importantes ganancias para los fabricantes de juguetes. Para el tiquitiquiti de septiembre (donde equivocadamente se celebra el día de la independencia) la venta de carnes, chicha, vino, carbón y otros accesorios se dispara. En octubre tenemos Halloween (no adhiero con esta celebración) que manda por los cielos las ventas de dulces, golosinas y accesorios. Afortunadamente noviembre no viene cargado de celebraciones como las anteriores, pero sin duda es el mes de la preparación para diciembre. Diciembre representa el mes donde la gente gasta más dinero, ya que están las 2 celebraciones más importantes del año y en donde se debe comer bien y regalar harto, y si los meses anteriores elevaron las ganancias y ventas de productos específicos, diciembre con la navidad dispara las ventas de practicamente todos los productos. Terminando diciembre, vuelve enero nuevamente con la venta de productos escolares.


La verdad es que por tradiciones adquiridas de otras culturas la navidad y otras celebraciones se han convertido en oportunidades de negocios, y han perdido el sentido totalmente. Por ejemplo, la navidad se ha convertido en una carrera por conseguir el PS3, el último IPOD, IPAD, y cualquier cosa que empiece con I y termine con alguna palabra gringa, el plasma más grande, y un gigantesco ETC. Se ha perdido completamente el sentido y el fin de la navidad donde debe primar el amor y los buenos deseos, pero realmente priman los regalos, las luces, los adornos, la comida, la bebida, etc. Personalmente, esas cosas no me van ni me vienen.


La navidad representa el nacimiento de Jesús quien fue un personaje fundamental en la historia de la humanidad,  y a pesar de la importancia de Jesús como personaje y de su nacimiento, a la gente no parece interesarle mucho. Sin embargo, más allá de la trascendencía del nacimiento de Jesús, lo más importante fue su muerte. Personalmente, creo que más vale celebrar y honrar la muerte de Jesús que su nacimiento porque la muerte de Jesús fue en beneficio de toda la humanidad.


En conclusión mis estimados lectores, la navidad no significa una fiebre o una furia por comprar y comprar, sino más bien una fecha donde debe haber reconciliación, amor, buenos deseos, compartir en familia, y por qué no, regalar una que otra cosita a los suyos. Quiero finalizar con un verso que con mucho respeto se los comparto:


Filipenses 2:8:
y hallado en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz.
Abrazo 

    

2 comentarios:

  1. La navidad debería ser un día de amor, de paz y de reconciliación, pues marca el comienzo de la esperanza.
    En lo personal, adoro esta fecha (creo que es mi celebración favorita), aunque cada año me invade la tristeza al observar el consumismo y la pérdida del verdadero sentido: el nacimiento de Jesús.
    Sería genial que cada persona, públicamente o en secreto, pudiera acordarse de esto y decir: "Feliz cumpleaños, Jesús".
    Muchas gracias por el post!

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